Declaración Dr. Reiner Fuellmich
29 de abril de 2024
Queridos amigos, con esta declaración quiero deciros que cada vez hay más razones para que seamos optimistas, al menos fuera de esta celda en la que llevo cautivo seis meses y medio. Ahora no sólo es palpable que la marea ha cambiado, sino que es claramente visible y claramente audible.
Al mismo tiempo, esta evolución mundial en la buena dirección se refleja en lo que está ocurriendo en mi caso, salvo que la semana pasada se produjo un giro alarmante en esta historia interminable de los servicios de inteligencia y que uno de mis abogados está recibiendo amenazas anónimas, que obviamente provienen de esa misma fuente.
Pero permítanme hablarles primero de los acontecimientos positivos que ahora podemos ver y oír claramente sucediendo en todo el mundo.
Como ya he mencionado, parece que mi trabajo, primero en el Comité de Investigación Corona y luego en el ICIC, ha sido reivindicado por la publicación de los documentos RKI, aunque fuertemente redactados. RKI es el equivalente del CDC americano. Estos documentos demuestran claramente que Corona no fue una pandemia, sino una plandemia escenificada y puesta en marcha por los principales medios de comunicación, políticos y otros, a los que se pagó para inducir el pánico entre la población y así poder controlarla y obligarla a destruir su propia economía y su propia salud.
Además de estos ahora infames papeles del RKI, el muy respetado ex presidente del más alto tribunal de Alemania, el Tribunal Constitucional, el profesor Papier, lleva meses pidiendo una investigación judicial de lo ocurrido durante Corona, afirmando que el poder judicial y, sobre todo, el más alto tribunal de Alemania, el Tribunal Constitucional, no protegieron los derechos y valores consagrados en la Constitución durante Corona.
Pues bien, sin duda podemos ayudar en esta investigación judicial, ya que disponemos de todas las pruebas.
Cualquiera puede descargarse fácilmente todas las entrevistas que he realizado con, por ejemplo, el Dr. Mike Yeadon, antiguo vicepresidente de Pfizer, el profesor Luc Montagnier, que ganó un premio Nobel por descubrir el virus del VIH y luego cambió de opinión y, como dijo la Dra. Judy Mikovits, que no era un virus lo que causaba el SIDA. Realicé entrevistas con el candidato presidencial Robert F. Kennedy Jr., el arzobispo Viganò, el profesor Sucharit Bhakdi, el Dr. Peter Breggin, el ex primer ministro de Terranova, Labrador, Brian Peckford, la superviviente de abusos rituales Cathy O’Brien, y muchos, muchos otros. Todo está ahí.
Pero hay, de hecho, aún más razones para el optimismo, ya que fuera de Alemania, el proceso de despertar ha cogido tanta velocidad que ya es imparable.
Los que están al otro lado de la valla, en particular, los que están en el negocio del pánico y el belicismo, tienen ahora todas las razones para entrar en pánico ellos mismos.
En la Universidad de Columbia en Nueva York, reminiscencias de lo que sucedió hace 55 años, es decir, durante la guerra de Vietnam, las protestas estudiantiles contra la guerra de Vietnam se han extendido ahora en su variación de protestas contra lo que está sucediendo en Gaza, ahora se han extendido por todo el país y luego en todo el mundo. Una vez más, son estudiantes y profesores de la Universidad de Columbia los que protestan contra una guerra, esta vez la guerra de Gaza. En los últimos seis meses han sido asesinadas más de 34.000 personas, el 70% de las cuales son mujeres y niños, y ahora se han encontrado dos fosas comunes, cementerios, con más de 300 cadáveres de pacientes y personal médico de hospitales, muchos de ellos con signos de tortura y asesinato al estilo ejecución.
Ni la administración estadounidense ni la UE pueden ignorar esto. Ambas han pedido una investigación independiente de las masacres.
Las protestas estudiantiles ya se han extendido a otros países, como por ejemplo Australia, y estudiantes y profesores están coordinando sus esfuerzos y conectando entre sí. A mí me parece una auténtica democracia de base que se opone al totalitarismo globalista de arriba abajo. Los manifestantes no sólo exigen el cese inmediato de las matanzas, sino que también preguntan: ¿cui bono? ¿Quién se beneficia de todo esto? ¿De qué manera?
Esto significa que, al igual que durante Vietnam, los manifestantes están rompiendo el muro oficial de propaganda y quieren llegar al fondo de lo que está pasando. Sólo que esta vez, parece que de verdad. Porque creo que no es casualidad que la petición de que se investiguen estos crímenes contra la humanidad coincida con la petición de que se investiguen los crímenes contra la humanidad del Corona.
A la gente del otro lado de la valla sólo le falta un paso para darse cuenta de que los mismos títeres de los medios de comunicación, la política y la pseudociencia a los que se pagó para mentirnos sobre Corona nos mienten ahora sobre Gaza.
Y a partir de esa comprensión vendrán preguntas de seguimiento, como por ejemplo, ¿qué está pasando realmente en Ucrania y qué tiene que ver exactamente con el calentamiento global provocado por el hombre? ¿Y por qué intentan mantenernos en modo pánico permanente? Buenas preguntas, ¿no cree?
Los acontecimientos positivos se reflejan en lo que está sucediendo en el proceso penal contra mí, excepto que aquí su pánico es tan grande que ahora están empujándose a sí mismos y el estado de la ley en un territorio muy, muy peligroso.
Por un lado, su relato oficial se ha derrumbado.
Tanto la vista como el contenido, aunque incompleto, es decir, ilegalmente redactado, de mi expediente han demostrado más allá de toda duda razonable que mi toma temporal de un préstamo con el fin de proteger algunas de las donaciones de embargo inminente de nuestra cuenta bancaria estaba perfectamente bien, ya que tenía tanto la autoridad para hacerlo en virtud de la regla de juicio de negocios y yo estaba dispuesto y capaz de pagar el préstamo. Las alegaciones en la denuncia penal, por el contrario, eran simplemente mentiras inventadas libremente que el fiscal habría descubierto inmediatamente si hubiera llevado a cabo una investigación real y no sólo una falsa.
El fiscal superior del distrito, que se negó siquiera a iniciar una investigación penal cuando examinó los mismos hechos hace menos de medio año o medio año, antes estaba en lo cierto cuando llegó a la conclusión de que no había absolutamente ninguna prueba de infracción penal.
Pero detrás de esta parodia de justicia, ahora podemos ver a los verdaderos criminales.
Los tres abogados de Berlín y el ayudante del fiscal del distrito que actuaron muy estrechamente cuando me secuestraron en México y luego se apoderaron de mi dinero y del dinero del Comité de Investigación Corona mediante fraude y extorsión. Incluso mi expediente ilegalmente redactado muestra que el ayudante del fiscal sabía desde el principio de su no-investigación que yo estaba en proceso de pagar el préstamo con el producto de la venta de mi casa y que había mucho más que suficiente dinero disponible para ello.
El expediente también muestra que él sabía perfectamente que los tres acusadores no tenían absolutamente ningún derecho a poner sus manos en ese precio de compra. Y el expediente demuestra que sabía que los tres autores de la querella criminal cometerían, no obstante, fraude y extorsión para hacerse con ese dinero. De hecho, los propios delincuentes le mantenían informado de sus actividades delictivas. No sólo les permitió cometer esos delitos, sino que ahora hay motivos razonables para iniciar un proceso penal contra él por complicidad en sus delitos o, como mínimo, por obstrucción a la justicia. Y esos son delitos reales, no sólo delitos menores.
Pero el asunto empeora. Con pleno conocimiento del hecho de que el único interés de los tres criminales en las actividades del Comité Corona se centraba en las donaciones que recibía por mi trabajo principalmente. Y sabiendo también, por supuesto, que ya me habían robado 1,15 millones de euros del precio de compra. Ahora embargó el plan de pensiones de mi abogado, cobrando todo hasta otros 700.000 euros para estos tres delincuentes.
Pero, ¿cuál es la razón de todo esto? Bueno, el expediente secreto sobre mí escrito por los servicios de inteligencia alemanes demuestra más allá de toda duda razonable que los tres abogados de Berlín y el fiscal adjunto fueron instruidos para hacer una especie de golpe de trabajo, para hacer el trabajo sucio, por así decirlo, para los que están tirando de los hilos entre bastidores. En última instancia, por supuesto, esto será contraproducente. Y esto resultará ser y ante los ojos del mundo, un golpe al estado de derecho en Alemania.
¿Por qué digo esto? Bueno, la semana pasada, los servicios de inteligencia se acercaron al juez que preside y su juez número dos en el panel, en mi caso, y los presionaron para, o al menos a él lo manipuló o los manipularon. Como resultado, este juez presidente nos acaba de informar de que a pesar de todas las pruebas en contrario, él definitivamente me encontrará culpable de cualquier delito.
Si hiciera falta alguna prueba más para demostrar que este es un juicio falso que innegablemente comenzó con mi secuestro en México, aquí está: Mi abogado, el Dr. Miseré, que me defiende en este juicio junto con mi colega Katja Woermer, acaba de recibir una carta anónima con una foto de su hija, claramente una amenaza de que algo le ocurrirá si sigue defendiéndome. Publicaré los detalles de toda esta historia criminal aún en desarrollo en mi próxima declaración.
Por ahora, permítanme concluir no con otra lista de mis canciones favoritas, sino diciéndoles que mi libro favorito es la novela de Harper Lee «Matar a un ruiseñor». Y mi película favorita es la del mismo nombre, protagonizada por Gregory Peck.
Habrá justicia. Y si el sistema es demasiado corrupto para para impartirla, vendrá de otra manera. Llámalo karma o justicia poética, pero llegará. Hasta pronto.
FUENTE: DRA ANITA BAIXAS
TRADUCCIÓN Y SELECCIÓN DE IMÁGENES: LO QUE PODEMOS HACER
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